Para situarnos en el contexto en el que sale a la luz este artículo, hay que decir que en 1996, un año antes de la publicación de éste, había sido elegido Presidente del Gobierno, Jose María Aznar (Partido PP). Aznar propuso un programa económico liberal para reducir el peso del Estado en la economía, eliminación de altos cargos en la Administración y liberalización monetaria. Respecto al ámbito educativo, Esperanza Aguirre fue nombrada por Jose María Aznar, Ministra de Educación y Cultura.
La idea principal del artículo sería el capital humano a través de la enseñanza como medio para el crecimiento económico.
Pedro Schwartz comienza el artículo haciendo referencia al profesor Gary Becker, Premio Nobel de Economía en 1992, el cual, afirma la importancia que tiene mejorar el capital humano de una sociedad a través de la enseñanza para el crecimiento económico. En este aspecto, el gobierno del PP fracasa por la ineficacia en la aplicación de su programa de calidad y libertad educativa, y no por la falta de atención a la escuela pública como critica el gobierno de la oposición (PSOE).
Así, continua haciendo referencia al discurso de la entonces ministra, Esperanza Aguirre, la cual critica al filósofo Rousseau por su Pedagogía Naturalista, en la cual reprocha que no se tienen en cuenta valores tan importantes como el afán de superación, el esfuerzo o el mérito individual. Y la ministra resalta el aumento de presupuesto en educación pública por encima de la inflación y el PIB.
El autor del artículo, también señala la necesidad de cambiar el viejo programa de la educación no selectiva, universal, gratuita por otro basado en la libertad de enseñanza, es decir, que padres y alumnos tengan el derecho de poder elegir libremente el establecimiento al que desean asistir, por lo que las instituciones de enseñanza (públicas o privadas), tendrán que competir entre ellas para ofrecer una educación de mejor calidad.
Para que se lleve a cabo una enseñanza con libertad de elección y con calidad pedagógica se concede "el bono escolar", es decir, las becas. Así, las familias con menor capacidad económica pueden optar a la enseñanza en una institución pública o privada.
A modo de conclusión se podría decir que el artículo, hace una crítica a aquellos que juzgan a Rousseau, el cual, defendía que el proceso educativo debe partir del entendimiento de la naturaleza del niño, del conocimhace una críticaiento de sus intereses y de sus características particulares. El niño aprende fundamentalmente por medio de las sensaciones que el mundo exterior le proporciona, es decir, por las experiencias. Así, también promovía la libre elección de estudios y formación, que hace referencia a las becas de ayudas para las familias, haciendo que pueda existir igualdad en la educación, al tener tanto ricos como pobres el derecho a elegir donde quieren formarse.
Sandra Gómez Roldán
2º Primaria A
No hay comentarios:
Publicar un comentario